Tal vez el tema del post suene algo raro pero lo explícaré más abajo.
¿Que es lo que pasa cuando un adorador de los pechos femeninos tiene la oportunidad de disfrutar ocasionalmente de un enorme y suculento par de tetas de una madura desatendida? Bien, pues lo que pasa es que un vampiro blanco no se perdería la oportunidad de disfrutar de tan apetitoso manjar mamario, y mucho menos si eso conlleva difrutar de la hembra en sí.
La verdad es, que cuando se trata de sexo pocas veces rechazo la oporunidad, a mi no me importa si la hembra que meto a la cama es una cuarentona o una veinteañera, pues se trata de disfrutar la ocasión y claro, también de mamar un buen par de pechos turgentes si se puede, y si no es mucho pedir, cargados de leche.
Hace ya un par de años tuve unas cuantas experiencias con una mujer casada y muy desatendida. La cosa es que el esposo de esta señora viajaba mucho, acá en México, mi tierra natal, es muy común el trabajo de trailero o camionero, lo cual resultaba en un largo tiempo de soledad para aquella madurita. Tiempo que aprovechamos varias veces para "darle vuelo a la hilacha" cogiendo como monos, en su casa.
Y una de las características que más recuerdo de esta hembra, además de lo complaciente que era en muchos aspectoss (bendita experiencia), son sus grandes y sabrosos pechos. Estos eran enormes, usaba unos tremendos brasiers de talla 36DD, eran algo así:
Por supuesto que disfrutamos mucho los encuentros que teníamos, era sexo salvaje cada vez que nos veíamos y supongo que ayudaba a calmar la calentura de la señora, y bueno, la mía también pues la primera vez era demasiado el morbo estar con una madura, y además con buenas curvas. Al final, una mujer experimentada puede superar por mucho a una jovencita veinteañera, y Erika, seguro lo hacía.
Pero en serio, pocos pares de tetas me he devorado con locura como las de ella, es de esas mamellas que uno mama y mama sin cansancio y el hecho de que tengan un tamaño considerable hace que queramos meter mucho de su volúmen en nuestras experimentadas bocas blancovampíricas. Sin embargo, a veces es tanto el éxtasis, que el hecho de estar mamando unas tetas de gran tamaño puede ser algo peligroso para un vampiro blanco.
Y es que hace unos días, luego de un largo tiempo de no saber de esta hembra, tuve la oportunidad de encontrarme con ella y recordar viejos tiempos, y si, tuvimos una buena sesión de sexo en la que también pude mamar nuevamente esos deliciosos melones de carne. La experiencia fué como aquellas que recordaba, hace dos años. Pero la cosa es, que al estar en plena práctica, me prendí demasiado succionando sus grandes ubres, y al tratar de meter más y más sus pechos en mi boca terminé por lastimarme un poco la quijada. Pero claro, como dicen por estos lares, "lo bailado nadie me lo quita".
No fué la gran cosa, y es más, ella no se dió cuenta, estaba muy ocupada siendo rellenada que no prestaba atención a nada más. Se me hizo un buen tema para el blog, y la verdad es, que a veces un enorme par de mamarias como las de Erika, pueden ser muy peligrosas.
Mamen tetas con cuidado hermanos del clan.
Cambio y fuera.