Hace poco me topé con un texto escrito por una mujer norteamericana de nombre
Lauri Jean Crowe acerca de la lactancia erótica, y me pareció muy interesante. En ese artículo habla sobre la lactancia y sobre el cómo una mujer puede obtener placer al amamantar a su pareja, y Lauri nos hace saber su experiencia personal al incluir estas actividades con su esposo. Les dejo debajo el texto completo que me encontré, y al final un pequeño contenido adicional que podrán descargar.
La lactancia ocurre cuando el cuerpo produce leche materna y emite ese fluido a través de los conductos galactóforos de los pechos. Normalmente ocurre alrededor del quinto mes de embarazo de la mujer y continúa tanto tiempo como la mujer siga amamantando, o los condúctos galactóforos estén siendo estimulados para producir leche. Sin embargo, como muchas mujeres saben, la lactancia puede continuar por mucho más tiempo después de que terminas de darle pecho a tu bebé y más aún después de que dejes de amamantarlo.
Así que, ¿qué hacer con el goteo de tus pechos? Los disfrutas justo como cuando lo hacías antes del embarazo. Los nutres, los masajeas y les brindas amor. Te maravillas con la plenitud que la lactancia produce y permites que tu pareja experimente y participe en el placer de una mujer lactante, junto a ti.
Recuerdo cuando me embarazé por primera vez y el amigo de mi esposo decían, espérate a que se escurra por la habitación cuando tenga un orgasmo. Su esposa, volteó sus ojos y sonrió un poco. Mi esposo y yo nos preguntábamos de qué se trataba eso, después de todo mis pechos se habían convertido en una amenaza cuando salíamos, goteando a través de la ropa y siempre con la necesidad de secarme, limpiarme, o desempaparme, pues gotean ese líquido en espera de la boca de un bebé.
Luego sucedió. Ahí estaba, embarazada por supuesto, haciéndolo de perrito y mis pezones empezaron a disparar leche por la habitación y golpeó en el muro del cuarto. Eso me hizo reir, y exitó a mi esposo. Supongo que es parecido a cuando se vienen en las porno y de repente acaba en los pechos de la mujer. Y sigue haciéndome reir cada vez que sucede, y sigue exitando a mi esposo, casi tanto como le exita probar mi leche materna.
Ahora, algunos nos llamarán paganos solo por hablar de probar la leche materna, pero yo también la probé. Después de todo, tenía que saber con qué estaba alimentando a mi bebé ¿no? No hace falta decir que el que mi esposo succionara mis pechos, se convirtió en una parte de nuestros juegos previos por un tiempo, y siempre nos preguntábamos cuando esa práctica "in crescendo" de hacer salir la leche materna a borbotones ocurriría, y siempre reíamos cuando salía.
Creo que los hombres y las mujeres necesitan erradicar los tabúes que existen con los pechos de las mujeres embarazadas. No hay duda de que algunos estarán indignados por las declaraciones de este escrito, hay todo un mundo de personas que no comprendo, que piensan que la lactancia está solo reservada para las necesidades del infante a amamantar. Sin embargo, si olvidamos que nuestros pechos pueden ser fuentes de placer y exitación sexual, y empezamos a verlos solo como una fuente de alimento, devaluaremos lo que significa ser una mujer. La lactancia no es solo para bebés.
Como verán, no hay de qué espantarse con el hecho de que un adulto mame libremente de los pechos de una mujer, y mucho menos que éste pueda ingerir de su rica y nutritiva leche materna. Y yo estoy de acuerdo con Lauri, la lactancia no es sólo para bebés.
Les dejo debajo el contenido adicional que les prometí, es un video de una conocida hembra lactante de nombre Kelly Hart, no recuerdo si ya he publicado algo de ella y sus tetas lecheras pero de no ser así les dejo éste muy ad hoc con el tema que manejó Lauri:
