El centro neurálgico de la obsesión mamaria. Somos y existimos por el disfrute de unas buenas tetas naturales, grandes, medianas, pequeñas; con o sin leche...

domingo, 4 de septiembre de 2016

¿Cómo lactar?

Hace un tiempo me encontré con una nota muy interesante en una cuenta de tumblr en donde suben fotos, gifs y videos enfocados al tema de la lactancia erótica. En dicha nota, una mujer explica en sus propias palabras, lo que a ella le ha funcionado para poder lactar, es decir, nos habla acerca de aquello que llaman "lactancia inducida".


Este tipo de contenido no podía faltar en este blog, así que desde hace unos días me dispuse a traducir el texto completo y se los dejo justo aquí:
Yo misma he hecho esto, y muchas mujeres alrededor del mundo por una u otra razón se han inducido la lactancia. Es un proceso muy simple que solo requiere tiempo.

Induciendo la Lactancia La técnica para inducir la lactancia sin haber estado embarazada es sumamente simple: estimular física del pezón y la areola, ¡y el cuerpo responderá produciendo leche! Olvídate de los fármacos para inducir leche y las técnicas exóticas: ¡todo lo que se necesita es estimulación!
La mejor y más confiable manera de inducir la lactancia es succionar los pechos de tu compañera por 20 minutos, ocho veces por día. No dejes que su compañero(a) succione sólo en el pezón; asegúrate de que él o ella se aferre de la misma manera en que un bebé lactante se aferraría al pecho de su madre. Al principio, incluso sin leche, relajate y amamanta a tu compañero como si tus pechos estuvieran llenos de leche. Con el tiempo, tu cuerpo responderá a las succiones produciendo leche

Si tus horarios no te permiten ocho sesiones de amamantos al día; reduce el número de sesiones a lo que puedas manejar cómodamente. Las mujeres logran inducir la lactancia con al menos dos sesiones de amamanto al día; sin embargo, las sesiones necesitan ser de al menos 20 minutos de duración. Ten en mente que lo más cerca que estés de tener ocho sesiones al día, mejor resultados habrá.

Si no tienes un(a) compañero(a) dispuesto(a) o muy confiable, puedes sustituir las succiones con masajes en los pechos, y estimulación del pezón y la areola. Puedes usar una bomba sacaleches si lo deseas; sin embargo, la expresión manual también funcionará. Ocho sesiones de 20 minutos de estimulación al día, es lo mejor para inducir la lactancia, incluso sin un(a) compañero(a) de confianza. Si tus horarios no te permiten ocho sesiones al día, puedes reducir el numero de sesiones a lo que puedas manejar cómodamente. Pero nuevamente, lo más cerca que estés de tener ocho sesiones al día, mejor resultados habrá.
¡NO TE COMPLIQUES CON LA TÉCNICA! Es muy simple: ¡tu cuerpo responderá a la necesidad de producir leche! Es un error complicar de más tu método de inducir la lactancia. ¡Simplifícalo! 
Si estás amamantando a tu compañero(a) para induciir la lactancia, su boca debería proporcionar suficiente lubricación para evitar el roce con el pezón y la areola. Si estás induciéndola usando la estimulación de manos y dedos, tal vez desees usar un lubricante para prevenir los roces. Hay muchos productos en el mercado, específicamente para lubricar y proteger los pezones y las areolas de las mujeres que amamantan. Una ducha caliente es una buena manera para estimular; el agua ayudará a lubricar y el calor ayudará a relajar tus pechos. 
Al principio, deberías sentir los pechos hinchados y adoloridos. Para lactar, el sistema linfático de tus pechos tiene que someterse a ciertos cambios, el resultado es un dolor temporal. Podrías llegar a notarlo especialmente en los lados de los pechos, cerca de tus axilas. A pesar de que el dolor es temporal, el incremento en el tamaño de copa debería continuar mientras estés lactando.
Si nunca has estado embarazada, y nunca has dado leche, el proceso puede tomar un poco más de tiempo. Aunque las glándulas mamarias maduran durante la pubertad, las glándulas tienen que someterse a cambios menores antes de que puedan producir leche: esto aumentará el tiempo del proceso de inducción. Ona vez que las glándulas mamarias han producido leche por primera vez,  nunca vuelven a ser como eran antes. Después de amamantar por primera vez, algunas mujeres nunca se secan completamente. No es raro que una mujer pueda echar una gota o dos, incluso años después de haber amamantado.
No busques fármacos o técnicas exóticas para inducir la lactancia: la técnica simple de estimulación física es todo lo que se necesita para poder lactar con éxito. Una vez que pasó la pubertad: mientras las glándulas mamarias de la mujeres estén sanas y no hayan sido alteradas removidas quirúrjicamente, ¡los pechos de una mujer son completamente capaces de producir leche! Esto incluye a mujeres que jamás han esado embarazadas, mujeres que ya entraron en la menopausia, e incluso mujeres que han tenido una histerectomía. La presencia del útero u ovarios, no se requiere para que una mujer pueda lactar: la única cosa que se requiere son pechos sanos y deseos de lactar.
Esto es todo lo que se necesita para la técnica física para inducir la lactancia; SIN EMBARGO, hay un factor más que se relaciona: ¡DEBES TENER UNA RAZÓN! 
Mientras que las glándulas sanas se suministran con líquidos corporales, las hormonas Oxytocina y Prolactina se estimulan eléctricamente, ¡y producirán leche indefinidamente! El obstáulo principal que evita que una mujer produzca leche con la lactancia inducida no es la técnica física; ¡es la psicológica! El cerebro debe enviar señales eléctricas, a través del sistema nervioso, para estimular las glándulas mamarias antes de que las glándulas produzcan leche.
Las glándulas mamarias, como otras partes de tu cuerpo, son controladas por el cerebro, particularmente una porción subcionsciente del cerebro. Si el cerebro percibe que el pezón y la areola son solamente secuales, el cerebro sólo responderá creando un sentimiento de placer sexual Si el cerebro percibe que el pezón y la areola necesitan leche, el cerebro responderá enviando una señal eléctrica, a través del sistema nervioso, causando que la leche baje, y que las glándulas mamarias produzcan leche. Los pechos continuarán produciendo leche mientras el cerebro envíe señales eléctricas, estimulando las glándulas mamarias. También, si el cerebro percibe que la estimulación del pezón y la areola es para ambas, placer sexual y leche, responderá creando ambas.
Cuando una madre empieza a amamantar a su bebé, ella automáticamente enfoca su mente  para producir leche subconscientemente. Es esta imagen mental y subconsciente lo que causa que su cerebro envíe la señal a sus glándulas mamarias ¡para que baje la leche y produzca leche! Además de la exitación sexual causada por la estimulación del pezón, una mujer que se induce la lactancia debe crear la imagen mental de producir leche, de la misma manera en que una madre lactante lo haría.
La técnica de estumulación física para inducir la lactancia es muy simple, (estimular físicamente los pezones y las areolas), sin embargo, crear mentalmente el escenario que causa que el cerebro estimule las glándulas mamarias para producir leche, está un poco más involucrado. Al mismo tiempo, ina vez que el subconsciente se entrenó para responder correctamente a la estimulación, poco importa lo demás: podrás hacer que baje la leche cuando lo necesites, y producir leche en las cantidades que tú necesites. Como podemos ver en el ejemplo de la bajada espontánea de leche y goteos: cuando una mujer es estimulada apropiadamente, producirá leche. ¡Toda lo que la estimulación física hace es decirle a tu cerebro cuándo y cuánta leche producir!
Ya sea que tu compañero(a) te induzca la lactancia, o lo hagas con masajes, estimulación de pechos, o sacaleches, elige una técnica física con la que puedas disfrutar y te sientas cómoda: luego enfócate en entrenar tu subconsciente para que produzca leche en vez de, o en conjunto, con la exitación sexual. El secreto de inducir la lactancia es crear un estado mental óptimo que cause que el cerbro estimule a los pechos para que baje la leche, y que las glándulas mamarias produzcan leche. Lo mucho que tardes en lactar, ¡depende enteramente de cuánto te tome crear ese óptimo estado mental! Y cuánta leche puedas producir, dependerá de cuánta leche quieres.
Si esto falla, hay fármacos que puedes usar para incrementar los niveles de prolactina, y son de uso seguro. Las hierbas también pueden usarse para ayudar a lactar.
HierbasAdicionalmente a los medicamentos descritos abajo, se ha sabido que las siguientes hierbas son útiles en incrementar la producción de leche en las mujeres, de acuerdo a las prescripciones: 
- Semilla de Fenogreco. 3 cápsulas (de 580-610 mg cada una) 3 veces al día después de comer.
- Cardo Santo. 3 cápsulas (de 325-390 mg cada una) 3 veces al día después de comer. 
Se llegó a estas dosis gracias de una revisión de varios artículos disponibles en varias compañias de herbolaria, y evidecias anecdóticas. Algunas mujeres con prescripciones, han descubierto que el Fenogreco tomado sin comida, puede causar dolor de estómago pero cuando se toma combinado con Cardo Santo el dolor se reduce o se elimina. Algunas mujeres reportaron que huelen a jarabe de arce o a curry mientras tomaban Fenogreco. Algunas mujeres descubrieron que estas hierbas son más efectivas si se comienza a tomarlaas después de completar el tiempo necesario de la píldora anticonceptiva, combinada con domperidona, y una vez que la mujere empezó a usar el sacaleches. También, algunas mujeres reportaron sentir náuseas cuando empezaron con las hierbas muy pronto. Por esta razón, no es conveniente tomar las hierbas mientras se toma la píldora anticonceptiva y antes de usar el sacaleches.
Como ven, esta información puede resultar muy útil para aquella mujer que esté tratando de inducirse la lactancia, ya sea que haya amamantado con anterioridad, o sin haber estado embarazada nunca.


De cualquier forma, aunque el artículo describe muy detalladamente el proceso para inducir sin recurrir a medicamentos, siempre hay que prestar mucha atención cuando se habla de hierbas o fármacos, y aunque aquí se mencionan varios, lo mejor y más recomendable siempre va a ser consultarlo con un profesional de la salud.
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